BENDICIÓN DE EMBARAZADAS

El día 8 de cada mes, en la parroquia se conmemora a Nuestra Madre del cielo, la Virgen María, bajo su advocación de Nuestra Señora de Luján. En esa misa se bendice a las embarazadas pidiendo la protección de Ntra. Sra. de la Dulce Espera durante el embarazo y el parto. También se bendice a los niños que aún no recibieron el sacramento del Bautismo. Como también a las familias que imploran la gracia de un hijo o están en proceso de adopción (avisar previamente para poder ser bendecidos). Dios como Padre Bueno, María Nuestra Madre y la Iglesia cuerpo místico de Cristo acompañan al ser humano en toda circunstancia de la vida, NADA ES AJENO AL SEÑOR. Nada sucede fuera de sus designios y su amor se derrama en los corazones de todos nosotros para un verdadero crecimiento humano y espiritual que culminará en el gozo de su eterna presencia. La bendición de embarazadas es un signo de que nuestra comunidad quiere mostrarse a favor de la vida, especialmente la del no nacido y de la madre embarazada. Estamos en tiempos muy difíciles donde la cultura de la muerte irrumpe con sus leyes. Como cristianos y como seres humanos defendamos la vida sin distinciones, sin condenas, con valentía y amor. Cualquier mamá que se encuentre en dificultades puede acercarse a la parroquia y alguna respuesta favorable para ella y su bebé encontrará además del amor de Dios.

Oración


Bendita seas María, Virgen y Madre, el Señor te llenó de gracia y alegría en la Dulce espera de Jesús. Te rogamos por los esposos que desean el don de un hijo, ayúdalos en esta esperanza y a apoyarse en el camino de la vida. Acuérdate de los que han abierto su corazón a la adopción, mantenlos en la alegría de su generosidad. También únete a quienes han recibido los hermosos nombres de Padre y Madre, para que con vos den gracias a Dios por su grandeza manifestada en el niño recién nacido. Finalmente recógenos a todos en el gran abrazo del Espíritu Santo, para que mostremos al mundo que podemos vivir como hermanos, porque todos somos Hijos de Dios. Amén. Nuestra Señora de la Dulce Espera ¡Ruega por nosotros y por nuestros hijos!


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